29 mayo, 2023

Moritz Neumüller: «Hay que abrir el mercado de la fotografía al público femenino, hay que romper con el cliché del coleccionista fetichista masculino»

La intención de atraer público especialmente sensible a la fotografía nos acompaña desde nuestros inicios como evento en torno a la materia y en esta décima edición lo hacemos posible gracias a dos vías de trabajo. Por un lado, a la búsqueda de complicidades con entidades y empresas nacionales y locales como son la Fundación Foto Colectania y Fundación MACBA, que nos han acompañado en ediciones anteriores, así como la incorporación de otras que han querido sumarse como el Cercle del Liceu, DKV o la Fundación Bassat. A este grupo le sumaremos un programa coleccionista internacional coordinado por Moritz Neumüller quien nos ayuda a crear una cita interesante más allá de nuestras fronteras con la intencionalidad de construir un evento a largo plazo que mueva un público interesado en la imagen en sí como pieza de coleccionista. Comentamos con Moritz su orientación de esta tarea y las complicidades que ha podido crear hasta el momento.

Moritz Neumüller, austríaco afincado en Barcelona, licenciado en Historia del Arte y Economía y doctorado por la Universidad de Viena sobre nuevos medios, es comisario independiente y docente en el campo de la fotografía y el arte digital. Actualmente, es comisario de la Aarhus Photobook Week (Dinamarca) y docente en IDEP Barcelona. Uno de sus proyectos más personales es la plataforma digital The Curator Ship, una herramienta para artistas y comisarios en el ámbito de las artes visuales.

Moritz, has formado parte de Art Photo Bcn desde sus inicios en diversas ramas. Comité de selección, visionador, tallerista… ¿Qué crees que le hace falta al circuito fotográfico de la ciudad condal, en comparación con otras? ¿Es un punto de encuentro físico una buena herramienta de cohesión?

Los encuentros físicos de las personas, pero también el contacto, o si quieres, con-tacto con el material fotográfico, sean copias impresas, libros, performance o instalación son vitales. En los mercados de fotolibros uno suele tener el privilegio de poder hablar con las personas detrás de las publicaciones, o sea editores/editoras y artistas. En las ferias, suele ser el o la galerista que representa, explica y vende las obras. En cualquier caso, los encuentros físicos durante estos eventos se suelen reflejar luego en relaciones estables, incluso amistades, que es lo que se aprecia en nuestro mundo cada vez más digital.

Es verdad que he intentado apoyar a Art Photo Bcn desde sus inicios y os felicito por la perseverancia y el esfuerzo necesarios para instalar un proyecto de este tipo en el complejo ecosistema artístico barcelonés. La ciudad está llena de iniciativas culturales, festivales, exposiciones, pasan muchas cosas, pero en cuanto a la fotografía realmente son las iniciativas privadas las que tiran del carro. En este sentido, Catalunya, o España en general es muy diferente a sitios como Francia donde la fotografía cuenta con una amplia dotación financiera de parte del estado. Las ferias de arte suelen ser iniciativas privadas, pero algunas gozan de bastante apoyo público. A nivel nacional, tenemos en marcha un Centro de Fotografía, en Soria, y espero que encontremos una manera para destacar, en este marco, el papel de Catalunya en la historia de la fotografía. No me refiero solo al hecho que la primera fotografía tomada en España se hizo en Barcelona, sino especialmente del importantísimo papel de las vanguardias y la creación contemporánea.

El circuito fotográfico necesita abrirse a nuevos públicos, desde la docencia a la búsqueda de un coleccionismo propio. ¿El comprador de fotografía es un especialista o viene del mundo del arte contemporáneo? ¿Qué diferencias encontramos entre el circuito europeo y el nacional en cuanto al consumo de fotografía?

Cada coleccionista y cada colección son un mundo. Hace unos meses que hice una entrevista a Judy Hochberg y Michael P. Mattis, para un número especial de la revista PhotoResearcher sobre el coleccionismo privado. Ellos, por ejemplo, se han especializado mucho en la fotografía histórica, y no compran lo que se considera arte contemporáneo. Lo interesante de la fotografía es que puede ser mucho mas que arte. Es tal vez la única disciplina que ha llegado a cerrar la brecha entre el arte y la vida, a través de su democratización, su ubiquidad, su uso masivo en la comunicación diaria, y en general es un medio asequible, en cuanto a precios. Obviamente hay artistas que juegan, por decisión propia o de sus representantes, en la liga del arte contemporáneo, y tienen ediciones cortas, formatos enormes y precios exorbitantes, pero esto es la excepción.

El boom del fotolibro y ferias como Art Photo Bcn han conseguido que siga siendo posible hacerse con una obra original por un precio razonable. Y esto es algo que se debería aprovechar para incentivar el joven coleccionismo y la abertura a nuevos públicos. Las galerías llevan años pidiendo pactos fiscales para incentivar el coleccionismo privado. Las exposiciones, las becas y las residencias son importantes para los/las artistas, pero no sustituyen la venta de la obra. Si pretendemos que el sistema tiene que ser sostenible, hay que empezar por ahí.      

Para esta décima edición hemos puesto en tus manos el crear conexiones con instituciones y coleccionistas europeos para invitarles a compartir su experiencia y que disfruten de lo que Art Photo Bcn puede aportar. ¿Con quiénes nos vamos a encontrar? ¿Cuál ha sido tu búsqueda y la respuesta de esos invitados?

Se han desarrollado diferentes modelos para motivar a coleccionistas para que vengan a una feria, y si los invitas por lo general están encantados de venir. Si compran o no es otro tema. Lo que propongo yo para esta edición especial de Art Photo Bcn es una serie de acciones específicas que incentivan el diálogo, el encuentro y el intercambio internacional.

Concretamente, hemos invitado a Uwe Schögl, el editor de la revista PhotoResearcher para que venga y nos explica los resultados de su investigación sobre el coleccionismo privado, junto con algunos de los que han colaborado en aquel número especial, como el coleccionista francés Serge Kakou o la experta en el mercado de la fotografía, Simone Klein. Esta mesa redonda y sus resultados, en forma de vídeos y posiblemente una pequeña publicación nos sirven como gancho para crear interés en el evento en sí. Al fin y al cabo, tenemos que conseguir que la gente conozca a Art Photo Bcn y que vengan por su cuenta, no solo porque se les invita. Eventos como Fiebre en Madrid Ars Libris en Barcelona han conseguido crear un publico fiel para el fotolibro, un ambiente vivo y una programación interesante. Estoy convencido que se puede utilizar este interés en las publicaciones para abrir también el mercado de la fotografía en general.

Volviendo a la figura de Uwe Schögl, es importante destacar que también es el responsable de la colección fotográfica de la Biblioteca Nacional de Viena, lo que le permite compartir también sus conocimientos sobre la conservación y el coleccionismo institucional. Para esto sirve la mesa redonda con el marchante y coleccionista parisino Serge Kakou y la experta Simone Klein que ha trabajado para casas de subastas, galerías, y colecciones.

Tenemos otros coleccionistas por confirmar en nuestra lista, y esperemos que puedan venir, o por lo menos poder informarlos en detalle sobre lo que hacemos en Art Photo Bcn y darle acceso a la plataforma online. Utilizaremos varios canales de comunicación para captar el interés de los circuitos internacionales de la fotografía, sobre todo, los europeos. Todos sabemos que como creadores, intermediarios, curadores, galeristas, editores competimos por el interés del público y no es fácil, pero creemos firmemente en lo que hacemos.

Personalmente creo que hay que abrir el mercado de la fotografía más al público femenino, hay que romper con el cliché del coleccionista fetichista masculino. La mayoría de mis estudiantes son mujeres y se abrirán su camino en el sector. En los últimos años, he tenido el privilegio de trabajar con artistas excepcionales como Tanit Plana, Gloria Oyarzábal o Angélica Dass, mencionando solo algunas. Creo que de la misma manera que hemos abierto el lado de la creación y la producción artística, tenemos que tirar los muros y barreras en el lado del coleccionismo, para conseguir que sea mas atractivo para jóvenes mujeres, pero también directoras de empresas o instituciones. Ahí hay un gran potencial, porque el arte, y la fotografía en especial pueden utilizarse de muchas maneras en el mundo de la empresa, de la comunicación, y de la cohesión social.